CREENCIAS III
- Hermón
- 14 ago 2019
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X- SALVACION. La salvación es una transformación espiritual, milagrosa que se efectúa en el alma y en la vida. Cristo es el Salvador (Lc.1:69, He.2:10, 5:9, 1Jn.4:14, Jn.3:17, Lc.19:10). 1. DOCTRINAS DE LA SALVACION: a) FE: Es la confianza en Dios puesta en su Palabra; es creer en una persona, como Abraham creo a Dios. La fe es indispensable para la salvación (Jn.3:36, He.11:6, Ef.2:8). b) ARREPENTIMIENTO: El arrepentimiento es la traducción de una palabra griega (Metanoia) que significa “tener otra mente, cambiar la mente. Es necesario el arrepentimiento para entrar en el reino de Dios es algo que en el Nuevo Testamento afirma (Mt.3:8, Lc.5:32, Hch.5:31; 11:18, 26:20, Ro. 2:4). c) EL NUEVO NACIMIENTO: Al venir al Señor somos una nueva criatura y todo cambia (2Co.5:17), entonces cuando esto surge venimos a ser hijos de Dios y miembros de la familia de Dios. (Jn.1:12-13). d) LA JUSTIFICACION: Acto por el cual Dios declara que el pecador que cree viene a ser justo y aceptable ante Él. Por cuanto Cristo ha llevado su pecado en la cruz, habiendo sido “Hecho Justicia” en su favor. (1Co.1:30). La justificación es gratuita y totalmente inmerecida (Ro.3:24); sin embargo, se efectúa sobre una base de total justicia, porque Dios borra todos nuestros pecados. e) LA SANTIFICACION: La palabra significa hacer santo, purificar, poner aparte para Dios. Hay dos medios de santificación: ritual y sobre todo moral y espiritualmente. Es inmediata y progresiva. XI- ORACION. La oración es la comunicación con Dios. La comunicación del Hijo de Dios con su padre, incluye la adoración, acción de gracias, la confesión y la petición. (Neh.1:4-11; Fil.4:6; Dn.9:3-19). Toda oración debe ser definida (Lc.11:13). Podemos orar en todo lugar (1Ti.2:8). La oración tiene que ser dirigida en el nombre de Jesús (Jn14:13-14). Ofrecida en el espíritu (Ef.6:18), con una fe firme en el Señor. Orando con entendimiento (1Co.14:15), esperando en su voluntad (1Jn.5:14; Lc.22:42). XII- LA SANIDAD DIVINA. El origen primero de la enfermedad y de la muerte debe ser buscado, evidentemente, en el pecado y en la caída. La sanidad divina se obtiene por a) Por confesar nuestros pecados al Señor (Stg.5:14-15). b) Por la obra de Cristo. (Is.53:4-5; Mt.8:17; 1P.2:24; Mt.9:29). c) La sanidad Divina también se obtiene través de la fe (Mr.16:17-18; Ex.15:26). d) Usando la oración intercesora (Stg.5:15-16). Todavía en la actualidad el Señor está vigente para sanar porque él es el mismo de ayer hoy y por los siglos (He.13:8). Sin embargo, Dios sana como Él quiere. Algunos experimentarán la mano soberana y sanadora de Dios en esta vida. Mientras que algunos sufrirán y no serán sanados hasta el cielo. XIII- ARREBATAMIENTO. Tenemos la promesa del arrebatamiento para todos aquellos que han sido fieles. Primero habrá la resurrección de los muertos en Cristo, y luego los creyentes vivos, entonces juntamente con los santos acabados de resucitar, serán arrebatados para recibir al Señor en el aire (1Ts.4:16-17). Este hecho preliminar de la venida del Señor es del mayor de los intereses para la iglesia, que recibe la instrucción de esperar a su Señor (Tit.2:11-14). XIV- LOS GALARDONES DE LOS CREYENTES. Muchos pasajes bíblicos sostienen la verdad de que los creyentes fieles recibirán premios por su servicio mientras están en el mundo (1Co.3:12-15; 9:16-27; 2Co.5:9-11; Ap.3:11; 22:12). Estas recompensas serán entregadas por Cristo en su tribunal en el cielo y después de haber sido recibido el creyente en el cielo.

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